Tradición Familia Propiedad

En la TFP nos encantaba la tradición. De los tres “valores imperecederos de la Civilización Cristiana” que supuestamente defendíamos, la tradición era ciertamente el más querido. No se podía pasar mucho tiempo en una sede de la TFP sin darse cuenta que nos sentíamos más cómodos en el pasado. Autodefinidos como “cruzados del siglo XX”, desde la decoración de la casa hasta la ropa que usábamos dejaba claro nuestro desdén por lo moderno, sea en su versión herética condenada por San Pio X (el modernismo) o en su versión diaria que nos agredía a diario con inmoralidad, socialismo, modas, progresismo, pelo largo, relativismo, superficialidad, y tanta otra cosa que andaba suelta por ahí.

No nos autoproclamábamos “tradicionalistas” porque había más de uno que así lo hacía, y lejos estábamos nosotros de asociarnos, aunque sea de nombre, con algún “falsa derecha”. Lefevristas, nacionalistas, sede-vacantistas o cualquier otro que integrase (o peor aún, liderase) un movimiento de derecha era para ser usado de la mejor manera posible, pero bien alerta y recordando siempre que nosótros éramos los únicos realmente fieles a “la causa” de Nuestra Señora que nos permitiría derrotar a la Revolución gnóstica e igualitaria y jugar un paper preponderante en la fundación del Reino de María. A los carlistas, requetés y vandeanos les teníamos más simpatía… seguramente porque ya estarían todos muertos o porque la TFP española no existía aún y no nos había llegado el turno de pelearnos con sus descendientes.


Fue a una jóven TFP la que le tocó vivir la hecatombe del Concilio Vaticano II. Esta versión moderna de la Iglesia nos cayó mal desde antes del primer día. Literalmente. En mi caso particular, mi Primera Comunión realizada el 13 de Diciembre de 1969 (fecha elegida por ser el cumpleaños del Dr. Plinio) en la Iglesia de Las Catalinas en Buenos Aires no tuvo el ambiente festivo que se había planeado originalmente porque nos pusieron la Misa Nueva a último momento. La TFP Argentina en pleno había pensado asistir a la Misa con sus capas y estandartes (yo mismo hice la Primera Comunión de ruguroso traje de Eaton con una banda colorada con el león rampante atravesada). Pero había llegado una comunicación de San Pablo diciendo que esta moderna versión de la misa “tenía sabor a herejía”, y la asistencia fue más discreta. Sin capas y estandartes. Mi segunda comunión fue en una iglesia de rito ucraniano, en la calle Curapaligue en Buenos Aires. Desde entonces, no asistí a ninguna “Misa Nueva”, ya que considerábamos que no estábamos obligados. Los curas se podían usar como administradores de sacramentos, ya que la comunión y confesión se seguian usando… pero durante la misa nos quedábamos discretamente (o no tan discretamente) afuera. En fin, no me quiero seguir explayando sobre el tema de la misa, que no viene al caso hoy. Tal vez en otra oportunidad.

Lamentablemente, esta devoción que verdaderamente sentíamos por la T de TFP no se extendía a las otras dos letras. La F y la P estaban considerablemente más abajo en la escala de cariño.

La Familia, asi con mayúscula, era un valor abstracto que defendíamos aunque hubiera que dividir y arruinar esas familias con minúscula de las que formábamos parte. Formaba La Familia parte de ese grupo de instituciones muy importantes para nosotros como La Iglesia o El Papado que defendíamos contra cualquier obispo o Papa que se pusiera en el camino. Y no se bien porque, pero todos los Papas se pusieron en nuestro camino. Desde Juan XXIII que tuvo la osadía de empezar el Concilio Vaticano, siguiendo con el siniestro Pablo VI, propulsor del progresismo y de la “detente” del Vaticano con los países comunistas que había que resistir cueste lo que cueste, siguiendo por Juan Pablo I que no paró de reirse durante los pocos días que duró hasta Juan Pablo II, que invitaba a judíos a rezarle a un Buda puesto arriba del sagrario en Asis o que posaba de bermudas junto a una sospechosa mujer y chico en sus tiempos de obispo en la revista Oggi. Por eso era tan heroica nuestra fidelidad al Papado, y tan emotivo nuestro canto del “Oh Roma Eterna.” Ni los Papas nos apoyaban!

Lo mismo pasaba con La Familia. Había que tener claro que estábamos llamados para algo mucho más alto que nuestras familias, por más “buenas” que sean. De hecho, bajo nuestra lógica interna, cuanto más buenas, peor, ya que la tentación de la mediocridad era mucho más poderosa que el llamado descarado de la perdición. Una familia católica, propiamente constituida era la peor amenaza a la perseverancia de un cruzado del Siglo XX, ya que cuando la cruzada se ponía dura (y se ponía dura a veces!), el llamado de sirena de un almuerzo en la tranquilidad de una familia decente era muy poderoso.

Me acuerdo que en una época se puso de moda en la TFP americana copiar el estilo de reunión que Joao Cla hacía en Praesto Summ en San Pablo. Ahí les decían en “Jour a jour”, a unas reuniones que Joao Cla hacía los domingos contando cada detalle de la vida del Dr. Plinio la semana anterior. Joao Cla era por aquel entonces una combinación de secretario y super-discípulo del Dr. Plinio y compartia la mayoría de sus días y su agenda. Estas reuniones, a las que concurría más gente que las que albergaba la sala de reuniones eran una oportunidad para que todos mostrasen su vehemente entusiasmo con fuertes exclamaciones de “Noooooosssa Senhora” con cada detalle grandioso o insignificate de la personalidad de Plinio. Era también una excelente oportunidad para Joao Cla ejercer su influencia y liderazgo entre los más jóvenes de la TFP mientras que algún hachazo era proporcionado a los que no eran de su agrado. Pero ese es otro tema.

Como decía antes, y conté en otros de mis recuerdos, hubo unos años en que se puso de moda copiar los modismos que provenían de San Pablo, y la TFP americana bajo el liderazgo de Fragelli decidió impementar las mismas reuniones, los domingos, en una sala del magnífico Estate que la TFP tenía cerca de Mt. Kisco, New York. La verdad sea dicha, a mi nunca me resultaron agradables las reuniones de Joao Cla, pero durante mis estadías en San Pablo no me quedaba otra que ir. No eran optativas. Pero New York era otra cosa. Así que junto con algún otro norteamericano me escapaba y no participaba. Me acuerdo una de estas oportunidades estaba yo tranquilamente jugando una versión modificada del tenis en la cancha cubierta que tenía la propiedad con algunos de mis compañeros desertores, cuando aparece en el balcón que daba sobre la cancha Raymond Drake, fiel seguidor de Fragelli y nos increpó diciendo que tendríamos que rendir cuentas en el Juicio Final de porqué estábamos jugando en vez de asistir a la reunión. No le dimos ninguna bolilla. Ahora que pienso… y si tiene razón? Nos enteraremos todos en el valle de Josafat, supongo.

Me olvidé de contar que en la versión Fragelli de estas reuniones, se tomaba lista de quien estaba y quien no estaba, promoviendo, naturalmente, sonoros ruidos reprobatorios cada vez que se leía un nombre de alguien que no estaba presente. Cuando leyeron el mío en otra oportunidad alguien me delató (no me acuerdo quien) que yo estaba en casa de mis padres almorzando. Después de claras manifestaciones por parte de Fragelli y otros de cuan abyecto era mi comportar que prefería esa mediocridad burguesa en vez de estar escuchando al borde de la silla sobre la ultimísima novedad llegada de San Pablo, Fragelli miró a su alrededor y vió a Steven Schmidder que recibió de Fragelli la misión de llamarme a casa a ver si me convencía de dejar a los míos e ir a la reunión. Con esa sonrisa sardónica tan característica de algunos brasileros, Fragelli le encomendó a Steven la misión, dada sus “dotes diplomáticas”.

Si había algo que Steven no era, era diplomático. Un tipo bastante simple y de pocos matices, le había pegado con una alabarda en la cabeza a otro miembro de la TFP, Silvio Dalla Valle, cuando salia de la capilla después de comulgar. Este disparate (hay tantos!) se originó cuando alguien decidió que nadie podía salir de la capilla mientras se distribuía la comunión y para ese fin pusieron dos guardias en la puerta con sendas alabardas. Pero la capilla era chica para el número de gente apretada adentro, y Silvio (otro brasilero vivo) decidió que la regla no era para el y pretendió salir entre los alabarderos. Steven, muy norteamericano y poco brasilero decidió que sus ordenes se iban a cumplir y bajó la alabarda en un esfuerzo de cerrarle el paso a Silvio, que, seguramente iba con Jesús en la boca! Ligándose sendo alabardazo en la cabeza… En fin… No comment.

Ese era el “diplomático” que llamó a casa, y confieso que su diplomacia no logró alejarme del whisky y el riquísimo copetín que seguramente estaba disfrutando. Desde aquel entonces Steven Schmidder es en casa “el diplomático”. Hace poco me enteré que quedó en el bando de Joao Cla con los Heraldos del Evangvelio y que se hizo cura con ellos o esta por hacerlo. Espero que haya crecido en edad y sabiduría desde aquellos tiempos!

Ya conté en otro lado que internamente, nos referíamos a la familia como “FMR”, o “Fuente de Mi Revolución”. Yo nunca lo hice porque en mi caso concreto, argumentaba yo, mi familia había sido “FMCR” o “Fuente de mi Contra-Revolución”, ya que fueron mis padres los que pensaron en su momento que la TFP era mi camino y ahi me pusieron. Obviamente abundaban los “diplomáticos” como Steven que no apreciaban tales diferencias, y sea cual fuere la familia de uno no era bien visto tener relación con ella.

Gracias a Dios el círculo intimo de mi familia siempre se mantuvo unido, ya que durante mucho tiempo todos compartíamos, de alguna forma, los mismos ideales. Y para cuando yo me fuí, creo que todos habíamos crecido un poco y ciertos fanatismos, al menos en casa, eran evitados. Pero la familia más grande no tuvo la misma suerte. A mi abuelo Carlos Ibarguren lo conocí cuando yo tenía 25 años. Gajes del oficio de cruzado, supongo.

Las que peor la pasaban eran las hermanas o hijas de miembros de la TFP. En aquel entonces, no había lugar para las mujeres en la organización. Algunas que pese a todo eran pertinaces y pretendían ayudar, eran tratadas con aparente amabilidad pero indiferencia o desprecio internamente. Estas señoras o señoritas que cosían nuestras capas coloradas, hacían y pintaban los estandartes que después flameaban en nuestras campañas, o en Argentina archivaban recortes de diario para ser usados depués en sendos libros o solicitadas en defensa de esta o aquella causa, recibian poco aliento. La única mujer especial en la TFP era, naturalmente, la madre de Plinio, Da. Lucilia Ribeiro dos Santos, que era venerada como una santa y cuya tumba era lugar de peregrinar habitual para cualquier miembro de la TFP que viviese o pasara por San Pablo. Poco conozco de la vida personal de esta Sra., y en la TFP tampoco circulaba mucha evidencia de sus virtudes heroicas, más alla que fue una buena madre para sus hijos. Dios quiera que esté en el cielo, junto con tantas de mis antepasadas.

Pero con la excepción de Da. Lucilia, el resto de las mujeres no era muy bien visto. Internamente nos referíamos a ellas como “fasuras”. Fasur era un guardia del templo que mandó azotar a Jeremías, y no sé porque la palabra “fasur” o “fasura” era un vocablo usado internamente para definir alguien de mala vida, inmoral. Y, naturalmente, con la brocha gorda de “fasuras” eran pintados todos los miembos del sexo opuesto. “Diplomáticos” como Steven no hacían muchas distinciones sobre la persona. El hecho que fuera mujer generalmente era suficiente para agruparla en esa categoría.

Hace poco recibí una carta de un español que recordaba como el líder de la TFP española en aquel entonces, Pedro Pablo, lo alertó a el y a otros que tengan ciudado con la “fasura” de mi hermana, que en aquel entonces vivía con mis padres practicamente desterrada en Tenerife, en pos de la tierra del Gran Exodo, como cuento en otro artículo. Que maldad y que disparate!

Recordando estas cosas, muchas de ellas ocurridas más de 20 años atrás, me impresionan varias cosas, entre ellas cuan convencidos estábamos de las cosas que hacíamos tan mal. Cuanta soberbia y cegera (generalmente van juntas) y cuantas vidas sufrieron por ello. Espero que así como yo he podido ver muchas de las cosas que he hecho mal, asi lo hayan hecho también aquellos que estuvieron conmigo en aquella increíble aventura que fueron mis días en la TFP.

Le agradezco a Dios haberme bendecido con una familia, la mía propia, la de mis padres, mis abuelos y más allá, que no es un valor teórico a ser defendido con un megáfono, sinó un ente vivo que no solo me alimenta hoy sino que en gran medida me ha creado, educado y convertido en quien soy yo. Gracias!

Alfonso

Comentarios

Andres dijo…
Alfonso, la familia se construye, se defiende y se quiere. Me recuerdo perfectamente del FMCR que me sorprendía mucho, no porque entendiera mucho el concepto sino por la valentía que tenías en decirlo ante cualquiera.
Saludos,
Andres
Anónimo dijo…
Saludos desde España de uno que luchó contra viento y marea para liberar su mente de todos los fanatismos vividos en la secta durante varios años. Afortunadamente ya hace 18 años que abandoné aquella organización siendo muy joven, con apenas 20 años, y así tuve tiempo de rehacer mi vida por completo. Deseo a todos los "apóstatas" mucha suerte en sus vidas y que nunca duden de que haber abandonado la TFP ha sido una decisión correcta. El profeta se fue al hoyo como todo mortal, la "bagarre" nunca llegó y mucho menos el merecido "Reino de María". Recuerdo que decían que el Sr. Dr. Plinio iba a subir al cielo en carroza de fuego como el profeta Elías, y que la "bagarre" iba a llegar antes del año 2000... sin comentarios.

Saludos
conciencia dijo…
Fui miembro de la TFP desde 1975 hasta 1981.Estoy de acuerdo con todo lo que dices. Para mi la TFP no tuvo jamas , una propuesta realmente valida, fue solo la locura de un iluminado, que se combino con una epoca revolucionada y aprovechando una habilidad discursiva, logro ir convenciendo y convenciendose de que era un semidios, abusandose de un monton de jovenes confundidos.Si uno miraba bien a un miembro TFP , su corte de pelo, su camisa abrochada hasta el cuello y sin corbata en pleno verano, sus zapatos abotinados,y sumado a esto una prohibicion absurda y francamente inexplicable de no mirar ni besar en la mejilla a una mujer , de no poder pisar ninguna sala de especatculos, ni practicar ni un solo deporte,y no pensar nada mas que en una supuesta lucha contra no se sabe quien, te estaban indicando que estabamos mas cerca de el Che Guevara, que de un hombre feliz de gozar de las cosas mas simples de la vida.Don Plinio seguramente ha sido un joven con enormes problemas de integracion , que gracias a que formo un grupo de sirvientes , sin ideas propias y dispuestos a dar la vida por el , se pudo olvidar de que su vida fue un fracaso descomunal.La fiesta de siervos adulones disfrazados a su antojo, festejandole todo lo que hiciera y manteniendolo economicamente, logro aturdirlo y a nosotros contaminarnos con sus amargas ideas.Me alegra mucho que vos y muchos otros se hayan dado cuenta.
Anónimo dijo…
Quiero verlos a todos ustedes el dia de su juicio! el dia en que le tengan que rendir cuentas a Dios por todo lo que El los amo, todo lo que hizo por ustedes.... y ustedes nada mas que llenos de infidelidades! Increible que se sientan orgullosos de haber hecho tal cosa!! Ahora veo que como decia el Sr. Dr. Plinio que muchos navegantes habian partido desde Barcelona en la conquista pero en la mitad del viaje desanimaron, fueron quedandosen uno a uno en una propia islita, pensando en el osito de peluche que habia dejado en su barcelona, sin pensar que tarde o temprano iban a tener la honra de conquistar todo una nuevo continente, todo un nuevo mundo! Muchos solo se quedaron ahi, no consiguieron ni volver atras... sus cadaveres simplemente bajaron a las profundas aguas del atlantico. Ojala no sea el cazo de ustedes.

Siento lastima, lo que hace que rece por ustedes! Nuestra Sra los ayude muchisimo a todos! Ojala "encuentren" la felicidad donde no esta... lo que dudo mucho!
conciencia dijo…
Estimado Anonymous. Estoy gratamente sorprendido de su intima correspondencia con Dios. Ya que esta tan vinculado y conoce a la perfeccion lo que a Dios lo ofende, me imagino que sabra exactamente lo que a Dios le hace feliz. Ahora ,me puede explicar como hizo un simple mortal con algunos añitos menos y un poquito menos de capacidad que el Creador, para tener la admirable osadia de iterpretar sus sentimientos, al punto de saber a quienes juzgara y que destino les espera. Estimado Señor, no se trata de leer simplemente algun parrafo y como por arte de magia transformarse en mediador abogado y juez ni mas ni menos que de Dios, mi estimado señor. No cree usted,si es que le queda alguna capacidad de razonamiento minima, que la distancia entre Usted y Dios es increiblemente infinita , que usted solo esta capacitado para opinar que ropa podria usar mañana y con suerte, alguna eleccion gastronomica en caso de tener posibilidades? Mi animo no es ofenderlo , pero le recomiendo sinceramente que se haga un minimo baño de humildad porque sus palabras suenan como las de un pobre ignorante que se jacta de entendido en cuestiones de fe. Poniendome un poco en su absurda posicion le aviso que en el juicio final , Dios lo mirara a los ojos y le dira ..HIJO MIO , TE CREISTE CON DERECHO A OPINAR POR MI, TU , QUE NO ERES NADA Y QUE NADIE TE PIDIO NADA,SABIAS DE MI TODO Y SIN MAS HASTA DECIDIAS EL DESTINO DE MIS HIJOS. NO TE PREOCUPES QUE COMO TU HAN SIDO LA MAYORIA, LAMENTABLEMENTE. PERO YO NO TE CONDENO,PORQUE SOY DIOS Y COMPRENDO TU IGNORANCIA. TENEMOS LA ETERNIDAD PARA QUE PUEDAS APRENDAS ALGO HIJO. QUEDATE TRANQUILO Y COMIENZA A ENTENDER.Saludos.
Anónimo dijo…
saudades tengo de aquel tiempo,era chico 15 años creo y participe por 2 años de esta secta que adoraba a Plinio y su madre como santos ,tenian oracioneslos dos y recuerdo lo de fasura ,a las mujeres no se las podia mirar a los ojos,recuerdo una campaña contra el divorcio,se entegaban fotos de ellos como si fuesen trofeos,yo era chico y me gustaban las reuniones que se hacian en av alcorta por la decoracion de la casa estilo medieval en fin tuve suerte de que alguien me alla podido sacar de semejante secta
M y M dijo…
Si me permite quisiera hacer algunas observaciones sobre lo escrito en este Blog
Ingrese a la T.F.P. con 15 años por medio de un amigo compañero del club deportivo.
Desde el inicio Tradición Familia y Propiedad me fue presentada como una organización de católicos conservadores y anticomunistas, así que no puedo afirmar de ninguna manera que fui engañado para ingresar en la entidad.
Mi posición en cuanto al comunismo era muy clara ya que mi padre fue secuestrado y asesinado por terroristas de izquierda vinculados a la teología de la liberación, así que se puede imaginar que de curas progresistas ni ahí….
Lamentablemente mi madre falleció tiempo después fundamentalmente a causa de la falta de su pareja de toda la vida.
De tal manera que antes de los 18 era huérfano y en una situación económica muy inestable (todos los ahorros de mi familia se los llevaron en el rescate de mi padre al cual nunca soltaron). La T.F.P. me ayudó en mis estudios, viví en sus sedes, me dieron una formación católica y profesional de la cual voy a estar eternamente agradecido.
Aquí es donde quiero resaltar a la persona del Dr. Plinio Correa de Oliveira, nunca conocí a un ser humano tan íntegro, inteligente y coherente con sus principios.
Años después conocí a una amiga y decidí retirarme de convivir junto a mis hermanos, (es difícil de imaginar para el mundo en que vivimos, pero en las sedes teníamos un trato de usted pero siempre buscábamos lo mejor para el otro como hermanos de vocación), para casarme con ella, y nadie me puso obstáculos.
Hoy en día dirijo una empresa, trato de ayudar a las personas y aplico las enseñanzas del Dr. Plinio Correa de Oliveira, al cual agradezco de corazón haber sido el padre que me faltó cuando la guerrilla sin ningún motivo mató al mío.
Con el pasar de los años y por motivo de mi actual actividad profesional, he conocido a muchos empresarios, políticos, jerarcas de la iglesia, intelectuales, etc… y le puedo asegurar que jamás encontré en nadie la entereza, honestidad y amor por la Iglesia Católica que siempre vi en el Dr. Plinio Correa de Oliveira.
Esperando haber sido de ayuda para conocer mas sobre la TFP, me despido quedando a las órdenes para sus consultas.
ALFREDO
Anónimo dijo…
Para el anonymus que nos quiere ver en el día del juicio:
Que le quede claro que a esta altura, las naves que partieron desde Barcelona todavía no encuentran el nuevo mundo, ni las prometidas tempestades que eran señal de su proximidad. Más triste aún, recuerde que el Cristóbal Colón que iba a bordo, quien aseguraba a cada brisa que la tormenta se acercaba, y que de todas maneras afirmaba haber recibido la revelación divida de que llegaría vivo a puerto, murió hace varios años.
Hoy en tierra firme, es posible mirar con más perspectiva y darse cuenta que no fue el único capitán que embarcó a una tripulación desde Barcelona. No fue el único que aseguró que su viaje era inspirado por Dios y que en futuro la entera corona se embarcaría tras de él. Ni siquiera era algo único de los navegantes de ese reino, desde otras tierras otros hombres prometían viajes similares hacia otros destinos.
Al final estos capitanes son bien parecidos, se arrogan el poder de poseer la verdad, la imponen a su tripulación, ésta la asume como dada por el mismo Dios y al poco tiempo lo tratan como tal.
El tiempo va dejando claro que de Dioses no tenían nada. Sus verdades absolutas se van derrumbando.

San J.P.II, ruega por nosotros.
Unknown dijo…

Estimados, también pase por la TFP, como muchos fui a lo que llamaban abordados, realmente fui con el fin de aprender KARATE y me encontré con un mundo fuera del que vivía, lo adopte porque siempre me parecieron principios nobles en el cual me permitió una relación muy personal con Dios y la Virgen del Fátima. Hay muchas cosas que no recuerdo ya que todo fue en 1984 / 1985, tuve la suerte de conocer a Plinio, digo suerte porque gracias a él, fundador, pude encontrar un lugar que me muestre un camino diferente. Es verdad, era muy joven tenia 15 y hasta el día de hoy me sigo preguntando que tuvo de malo pasar ese momento de mi vida. Nunca vi nada raro, si un profundo fanatismo anticomunista y anti modernismo. Pienso que fuimos privilegiados por tener las oportunidad de ver otra visión del mundo, después de grande seguramente elegiríamos que cosas tomábamos y que cosas no. Realmente me marco mucho pero doy gracias a Dios por esa oportunidad y como me dijo el Dr Plinio cuando le pedí inocentemente que no me fuera nunca de ese lugar, él me respondió nosotros te tendemos la soga, depende de vos agarrarte fuerte y subir al barco. Eso es lo que fueron para mi una soga que me ayudo mucho a formarme como persona a ver las cosas de otra manera y cuando la vida me marco otro camino simplemente la solté, pero jamas me arrepiento de ese paso por mi vida. Hoy me gustaría tener esa templanza que tuve para seguir a DIOS con todo mi ser, la realidad es que este mundo es como se veía venir cada vez esta mas a la merced del demonio que confunde a las personas llevándola por pasajes oscuros y haciéndolo dudar de muchas cosas. Yo sigo luchando desde mi lugar como un soldado de Dios aunque desde las sombras. Les deseo todo lo mejor.....

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